Nunca imaginé que podría llegar a sentir tanta admiración y estima por un país que no es en el que paso mi día a día. Por una tontería, sumada a muchas otras, me he dado cuenta de que quiero mucho más al lugar donde nací que al país que me ofreció su lengua y su vida. Me enorgullezco de unos colores, pero aborrezco otros. No se exactamente el porqué, pero ahora veo que me identifico mucho más con esa cultura de la que aún me falta mucho saber. Por esto deseo aprender, aprender, aprender...
14.7.10
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment